La injusticia social es un problema mundial: el desequilibrio en el reparto de los bienes y derechos sociales. Se expresa de distintas formas y niveles de gravedad, y genera conflictos sociales y políticos.
En nuestra ONG vivimos cada día diversos ejemplos de estas injusticias y hoy queremos denunciar una de ellas: EL ENCHUFISMO.
Algunos estudios demuestran que tres de cada cuatro ofertas de trabajo en nuestro país, no se hacen públicas, ya que se cubren a través de contactos o recomendaciones personales.
Cuando una empresa decide contratar “a dedo”, se arriesga a generar desmotivación entre los empleados, rencillas personales y en definitiva un mal ambiente laboral que puede pasar factura.
¿Qué tiene de beneficioso que una persona sea amigo o familiar de un miembro de la empresa si no va a ayudar a mejorarla? ¿Qué beneficios aportan a las empresas estos “fichajes”, si a la larga puede convertirse en un dolor de cabeza?
Esta semana cinco personas usuarias de T’Acompanyem han encontrado trabajo. Sin enchufes, con un currículum adecuado y nuestra garantía sobre su seriedad y responsabilidad.
También esta semana muchas familias han recibido alimentos. Gracias a la Fundación Social Áurea, a las empresas colaboradoras, voluntarios y a Eric, que con su furgoneta hace posible la entrega de alimentos a nuestros usuarios.
 
Puede ser una imagen de fruta e interior
 
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