La virtud de ser solidarios y del apoyo mutuo, surge de forma espontánea y natural dentro de las sociedades humanas y de ella depende en parte, el porvenir de nuestra especie y de la naturaleza en si, dándonos paz, seguridad y libertad.
Las personas que ejercemos el voluntariado nos sentimos bien viendo como parte de nuestras vidas cobran sentido con lo que hacemos.
Los voluntari@s somos lo que damos a los demás, y sabemos que cuanto más damos más recibimos.
La vida nos hace reflexionar sobre esto, y esa sensación de voluntad hacia los demás, nos hace crecer como individuos y como seres humanos.
Esta semana hemos empezado con una dinámica de grupo sobre el tema de LA SOLEDAD EN LOS DESEMPLEADOS, se han impartido clases de informática, hemos atendido a 30 personas que por diferentes motivos se encuentran sin un puesto de trabajo, pero a la vez, 15 personas han encontrado un empleo digno y nos hace sentir orgullosos de nuestra labor como oenegé.
El viernes las familias se fueron contentas por la entrega de alimentos(frutas, verduras, carne, lácteos..).
T’Acompanyem seguirá con todos vosotros, sin dudar, y con todas las fuerzas que nos dais todos!